El procurador Miquelarena y el funcionario Sandilo declararon que “Tato” Ramón hizo obras para sus casas
El jefe de los fiscales declaró por escrito y explicó que le pagó $ 15 mil para terminar una habitación con vestidor. El secretario privado del gobernador Mariano Arcioni le encargó una pileta. Ambos contactos con Dual Core fueron a través de Diego Correa. Los trabajos dejaron conformes a los dos.
El procurador general Jorge Miquelarena declaró que Juan Carlos “Tato” Ramón terminó en su casa de Playa Unión una habitación y un vestidor construidos en seco y que el contacto entre ambos lo hizo Diego Correa.
El testimonio del jefe de los fiscales lo pidió el defensor Omar López y se cumplió por escrito. Se leyó ayer en el juicio por El Embrujo. “Conozco a Ramón. Mi esposa Patricia de la Torre es dueña de una casa en Playa y en mayo de 2015 proyectamos una ampliación con un presupuesto de 64.527 pesos de mano de obra”, describió la nota.
Ampliación
El trabajo se inició y el constructor original prometió terminar en dos meses. Pero tras varias demoras, debió abandonarlo por razones particulares y se rescindió el contrato.
En febrero de 2016 el matrimonio Miquelarena buscó entre sus conocidos y Correa aportó el número de “Tato”, que llamó al procurador. “A la obra le faltaba el 20% incluyendo colocación de pisos, terminación de paredes y cielorraso, colocación de artefactos de iluminación y pintura. Ramón me llamó en marzo de 2016 y se ofreció para el trabajo”.
Miquelarena estimó que le abonó 15 mil pesos a Ramón. “No encontré la factura en la documentación de la ampliación pero puedo asegurar que el trabajo se terminó y se pagó”, escribió.
Una pileta
Alejandro Sandilo, secretario privado del gobernador Mariano Arcioni, declaró que en octubre de 2015 se contactó con “Tato” Ramón para una obra en su casa, que el imputado terminó en diciembre. “Fue una pileta chica, de 4 metros por 3, hecha de material porque el patio era muy chico para colocar una de plástico”.
Sandilo reveló que la recomendación se produjo en “una comida con mis amigos Diego (Correa) y Natalia Mac Leod), que me pasaron el contacto. Ellos tenían una pileta similar”. Para su pileta le pidió presupuesto a Ramón ya que para la obra “saqué un préstamo en el Banco Chubut que todavía estoy pagando”.
“Fue el único trabajo que hizo para mí. Quedé conforme y la obra quedó perfecta”. Alejandro Sandilo admitió que no hubo factura y que el presupuesto tenía membrete de la empresa Dual Core.